Benito Pérez Galdós (1843-1920) fue un gran escritor representante de la novela realista española del siglo XIX. Académico de la Real Academia desde 1897 y nominado al Premio Nobel en varias ocasiones. Al terminar sus estudios en 1862, se traslada a Tenerife para estudiar el Bachiller en Artes y posteriormente se marcha a Madrid para estudiar Derecho.
Allí acude a las tertulias del Ateneo y los cafés Fornos y Suizo, donde frecuenta a intelectuales y artistas de la época. Escribe en los diarios La Nación y El Debate. En 1873 inicia la publicación de la primera serie de los Episodios nacionales. Su popularidad ante los lectores durante la década de los años noventa va creciendo con su segunda serie de los Episodios Nacionales.
Viaja por Europa como corresponsal de prensa, conociendo así corrientes literarias del momento como el realismo y el naturalismo. Su obra tiene influencias de los franceses Honoré de Balzac, Émile Zola, Gustave Flaubert y el inglés Charles Dickens, entre otros. Aficionado a la política, se afilia al Partido Progresista de Sagasta y en 1886 es diputado por Guayama (Puerto Rico) en las Cortes.
En los inicios del siglo XX ingresa en el Partido Republicano y en las legislaturas de 1907 y 1910 es diputado a Cortes por Madrid por la Conjunción Republicano Socialista; en 1914 es elegido diputado por Las Palmas. Galdós es uno de los autores más prolíficos de su generación, tanto en novela como en teatro.
Entre sus obras más importantes destacan Fortunata y Jacinta (1886-1887), Miau (1888) y Tristana (1892). También escribió algunas novelas más experimentales como Realidad (1892), La loca de la casa (1892) y El abuelo (1897), algunas de las cuales adaptó también para la escena.
El éxito teatral más importante, sin embargo, lo obtuvo con la representación de Electra (1901), obra polémica que provocó numerosas manifestaciones y protestas por su contenido anticlerical. Galdós es considerado un narrador capital en la historia de la literatura en lengua española, hasta el punto de ser propuesto por varios especialistas y estudiosos de su obra como el mayor novelista español después de Cervantes.
Allí acude a las tertulias del Ateneo y los cafés Fornos y Suizo, donde frecuenta a intelectuales y artistas de la época. Escribe en los diarios La Nación y El Debate. En 1873 inicia la publicación de la primera serie de los Episodios nacionales. Su popularidad ante los lectores durante la década de los años noventa va creciendo con su segunda serie de los Episodios Nacionales.
Viaja por Europa como corresponsal de prensa, conociendo así corrientes literarias del momento como el realismo y el naturalismo. Su obra tiene influencias de los franceses Honoré de Balzac, Émile Zola, Gustave Flaubert y el inglés Charles Dickens, entre otros. Aficionado a la política, se afilia al Partido Progresista de Sagasta y en 1886 es diputado por Guayama (Puerto Rico) en las Cortes.
En los inicios del siglo XX ingresa en el Partido Republicano y en las legislaturas de 1907 y 1910 es diputado a Cortes por Madrid por la Conjunción Republicano Socialista; en 1914 es elegido diputado por Las Palmas. Galdós es uno de los autores más prolíficos de su generación, tanto en novela como en teatro.
Entre sus obras más importantes destacan Fortunata y Jacinta (1886-1887), Miau (1888) y Tristana (1892). También escribió algunas novelas más experimentales como Realidad (1892), La loca de la casa (1892) y El abuelo (1897), algunas de las cuales adaptó también para la escena.
El éxito teatral más importante, sin embargo, lo obtuvo con la representación de Electra (1901), obra polémica que provocó numerosas manifestaciones y protestas por su contenido anticlerical. Galdós es considerado un narrador capital en la historia de la literatura en lengua española, hasta el punto de ser propuesto por varios especialistas y estudiosos de su obra como el mayor novelista español después de Cervantes.
Obras de Benito Pérez Galdós
Acerca de ancilo59
Hola, Mí nombre es Andrés Cifuentes. Soy un andaluz que lleva desde 1967 viviendo en Madrid. Es una ciudad cosmopolita, centro de negocios, sede de la Administración pública, central del Gobierno del Estado y del Parlamento español. Ojalá quien habla de nuestra incultura se acuerde de Séneca, Columela, Maimónides, Averroes, Góngora, Bécquer, Alexandre, Lorca, Juan Ramón Jiménez, Machado, Falla, Zambrano, Picasso, Velázquez, Murillo, Alberti, Carlos Cano, Gala, Luis Rojas Marcos, Sabina…
0 comentarios:
Publicar un comentario